Tradición

A partir de 1952, Francisco Ruiz, hijo del matrimonio se hace cargo del negocio. Él ya había empezado su aprendizaje con tan sólo 12 años. Desde 1958 el desarrollo industrial de esta ciudad permitió que el poder adquisitivo de sus gentes no estuviera limitado sólo a los pudientes. La prosperidad llegó entonces para todos y Francisco junto con su mujer Mª Carmen, que era la responsable de la cocina, pudieron afrontar las tres reformas que se han llevado a cabo en el local, la última en 1974 corresponde al estado actual.

De ser un simple bar, pasó a ampliarse el espacio de mesas y bancos corridos en la planta baja y por último se abría una sala restaurante en la planta primera del edificio. Su comida siempre ha sido tradicional y nunca han faltado los mejores platos de temporada angulas, truchas de río, la caza, perretxicos, cordero, merluza a la cazuela. La calidad de sus productos y el buen trato a los clientes han intentado ser siempre los ideales de este establecimiento.